por Les Wallach
Viajamos hoy hasta Arizona para conocer el edificio más caro de Tucson ($ 22.000.000). Considerada una de las mejores casas de Estados Unidos, es propiedad de Cary Marmis, el privilegiado presidente de Empire West Companies.
Posee todo lo que un comprador potencial puede necesitar, o bien desear: 31.000 metros cuadrados (1.200 sólo dedicados a la cocina y 3.000 a la sala de entretenimiento), 24 habitaciones espectaculares, un garaje con plazas para seis coches, un espacio con 300 asientos para cenas formales, dos ascensores, pista de tenis… Y la lista sigue. Lo que conocemos como una casa de un multimillonario.
El arquitecto
El encargado de esta obra, Les Wallach, es un arquitecto que forma parte del grupo que él mismo fundó, Space and Line. Considerados pioneros de una arquitectura sostenible en la construcción contemporánea desde 1978, sus trabajos ya han sido valorados con premios varios como the American Institute of Architects (AIA) o the AIA Western Mountain Region Firm of the Year. Sus estudios sobre una integración silenciosa del edificio en la estructura del paisaje ya han sido aplicados a obras como la que vemos aquí, u otras como Hansen Residence, Harmony & Balance o City of Tucson Fire Central entre otras. Para más información podéis visitar su espacio: http://www.lineandspace.com
El arquitecto
El encargado de esta obra, Les Wallach, es un arquitecto que forma parte del grupo que él mismo fundó, Space and Line. Considerados pioneros de una arquitectura sostenible en la construcción contemporánea desde 1978, sus trabajos ya han sido valorados con premios varios como the American Institute of Architects (AIA) o the AIA Western Mountain Region Firm of the Year. Sus estudios sobre una integración silenciosa del edificio en la estructura del paisaje ya han sido aplicados a obras como la que vemos aquí, u otras como Hansen Residence, Harmony & Balance o City of Tucson Fire Central entre otras. Para más información podéis visitar su espacio: http://www.lineandspace.com
Exterior
Campbell Cliffs necesitó dos años y medio para ser diseñada y siete más para ser construida. Esto se debe al esfuerzo en seleccionar y localizar el material preciso, con un total cuidado, para proteger la naturaleza que envuelta el edificio, el cual queda situado justo - como dice su nombre- encima de unos acantilados que ofrecen unas vistas espectaculares. La casa parece haberse integrado completamente entre las rocas y el color de las piedras que la forman juega todavía más a favorecer este encaje en el medio. La idea es construir un espacio sin una clara distinción entre el exterior y el interior (being inside is like being outside).
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| (click sobre la foto para hacerla más grande) |
Interior
Del interior podemos destacar la gran cantidad de texturas que podemos encontrar gracias a la variedad de materiales: baldosas de piedra especial de California, techo revestido de madera de los históricos bosques de Washington y luego hormigón aplicado de una manera original. La luz natural entra por las múltiples ventanas y se extiende por toda la casa. Os dejo con unas muestras fotográficas del interior de la casa. Para más información, os recomiendo visitar la propia página web que tiene la casa: podéis hacer una visita virtual y hay un catálogo con información muy interesante donde puedes conocer a fondo los detalles de cada una de las habitaciones de esta mansión (está en inglés) http://www.campbellcliffs.com
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